viernes, 22 de noviembre de 2013

Informe hipermedial

  Una vez elegido el tema, lo primero que hice para comenzar el trabajo fue ir a la hemeroteca en busca de información del barrio Echesortu que me pudiera servir para darle un marco al trabajo. Allí encontré algunos recortes interesantes sobre los inicios del Centro Comercial Paseo Echesortu y sobre las características generales del barrio. Luego, fui a la biblioteca en busca de un libro que me habían recomendado, “Echesortu- ciudad pequeña metida en la gran ciudad” del historiador Nicolás De Vita. Este libro me sirvió para reconstruir la historia del barrio desde sus inicios en 1880.

  Después de haber recolectado información en la hemeroteca y biblioteca, me dedique a buscar información en internet sobre la construcción en Rosario tratando de encontrar datos y estadísticas certeras que me permitan mostrar el avance de este fenómeno. Tal es así, que googleando  llegué a un informe realizado por la Fundación del Banco Municipal donde me encontré con una gran cantidad de datos referidos a la construcción en Rosario en el periodo de 2002-2011.

  Luego de tener recolectada la información que podría llamar contextual, me dediqué a buscar la información necesaria para tratar mi temática, el boom de la construcción en el barrio Echesortu y la reconfiguración del paisaje como consecuencia. Uno de los recursos utilizados fue realizarles una encuesta a vecinos y comerciantes de la zona para saber sus opiniones, poder llevarlo a cabo me resultó muy fácil ya que vivo en la zona. Las preguntas realizadas fueron las siguientes:

1) ¿Lo afectó la gran cantidad de edificios que se construyeron en los últimos años?
Si – No
2) ¿De qué manera?
Positiva – Negativamente
3) Si lo afecto de manera negativa ¿Cuáles fueron esas consecuencias?
Inconvenientes con la energía eléctrica
Inconvenientes con el agua
Pérdida de luz natural
Incremento de la contaminación sonora
Deterioro en las propiedades adyacentes a construcciones
Inconvenientes con el estacionamiento de autos
Otros:

Si lo afecto de manera positiva ¿Cuáles fueron esos beneficios?
Mayor cantidad de clientes
Mayor seguridad debido a mayor cantidad de movimiento
Otros:
5) ¿Cree que se deberían haber conservado ciertos lugares históricos que se demolieron para hacer un edificio?

  Una vez realizada la encuesta y analizado los resultados me surgió un inconveniente: ¿Cómo seguir adelante con el trabajo si una parte de los encuestados se manifestaban a favor de la construcción y la otra en contra? Ambos con argumentos totalmente razonables daban su mirada opuesta de un suceso innegable. Luego de mucho pensar y analizar qué camino seguir, entendí que lo mejor era poder mostrar en el trabajo el avance de la construcción en el barrio no como un hecho positivo ni negativo sino como una realidad necesaria en una ciudad que se encuentra en pleno crecimiento. Lo que si me pareció necesario destacar, al igual que lo hicieron vecinos y comerciantes, es la importancia de mantener los lugares históricos y los espacios verdes, sólo con esa condición entiendo a la masiva construcción realizada en el barrio como algo necesario para el desarrollo de la ciudad.

  Otro de los recursos utilizados fue realizarle una entrevista a Saúl Eluk, el presidente desde sus inicios del Centro Comercial Paseo Echesortu. Lo elegí tanto como comerciante como conocedor de la zona ya que tiene un negocio en pleno barrio Echesortu desde hace más de 30 años.
Entrevista completa

Páginas de internet consultadas
http://guiaechesortu.com.ar/
http://www.paseosrosario.com.ar/4/home.php
http://www.aer.org.ar/compras-a-cielo-abierto-una-opcion-consolidada/
Páginas de fotos utilizadas
http://www.skyscrapercity.com/showthread.php?t=641888&page=19
http://www.skyscrapercity.com/showthread.php?t=220164&page=21

Vecinos y comerciantes: opiniones opuestas

  A partir de una encuesta realizada a vecinos y comerciantes del barrio pude extraer datos significativos sobre cómo les afectó tanto de manera positiva como negativa el boom de la construcción a quienes viven allí. Sobre un total de treinta encuestas realizadas, veinte fueron hechas a vecinos- cercanos a una obra en construcción o un edificio ya terminado-  y las restantes diez a comerciantes de la zona.

  De los veinte vecinos consultados, quince dijeron tener graves inconvenientes a partir de las obras en construcción mientras que solo cinco aclararon que los inconvenientes existieron pero que fueron mínimos. El mayor de los problemas registrados son los relacionados con la energía eléctrica y con el agua. Cerca del 80% de los vecinos aseguró tener esta clase de problemas, sobre todo en el verano cuando el uso de la energía es mucho mayor. En el caso del agua, aseguran tener menor presión durante todo el año a partir de las nuevas construcciones.

  Otro de los hechos negativos que surgen a partir de la edificación son los daños producidos en las viviendas adyacentes a las construcciones. Entre los encuestados, solo un muy bajo número (2 personas) expresaron haber sufrido esta clase de problema, sobre todo rajaduras en las paredes linderas con la construcción.

  La pérdida de la luz natural junto con la pérdida de la privacidad son otros de los aspectos negativos que expresaron los vecinos. Del total consultado, cerca de la mitad aseguró tener estos inconvenientes, debido a que la gran altura de los edificios tapa la luz natural del sol y genera además la perdida de la privacidad en las casas con terraza o patio.

  Por otro lado, la gran mayoría de los comerciantes de la zona tienen una mirada totalmente opuesta a la de los vecinos. La causa de esto es que, con la construcción de un nuevo edificio y luego de que el mismo es habitado, el número de personas que viven en la zona es mayor y por lo tanto también aumentan las ventas.

  Los negocios en los que se puede verificar una mayor cantidad de ventas son aquellos de consumo diario, como los pequeños almacenes, los destinados a la venta de artículos de perfumería y limpieza, los quioscos, las heladerías y en algunos casos los bares. Mientras que, en los que no se observa una variación de las ventas son en aquellos en los que el consumo no es diario y depende además de las preferencias del consumidor, tales como los locales de electrodomésticos y los de ropa.

  Un punto en común negativo expresado entre el total de los encuestados, tanto vecinos como comerciantes, es el incremento de la contaminación sonara debido especialmente a las grandes máquinas muy ruidosas que se utilizan durante la construcción. Las obras junto con el ruido comienzan desde muy temprano, alrededor de las siete de la mañana y no para hasta las seis o siete de la tarde. Además, un gran porcentaje de los encuestados, cerca del 90 % expresó que a partir de la construcción masiva de edificios aumentaron los inconvenientes para poder estacionar el auto


Fotos: http://www.flickr.com/photos/wilhelm1989/sets/72157635038146761/

jueves, 21 de noviembre de 2013

Imágenes del crecimiento

Durante los últimos diez años, el barrio Echesortu sufrió un cambio brusco, de casas antiguas y bajas a torres grises de cemento. Ninguna zona quedó libre de edificios, ni siquiera la tradicional y  comercial calle Mendoza ni la histórica avenida Francia. En la actualidad, en cada cuadra del barrio hay uno o más edificios, una obra en construcción o una casa con la empalizada colocada esperando ser tirada abajo.

Las siguientes son imágenes que representan el boom de la construcción en el barrio Echesortu (cabe señalar que algunas de las obras ya están terminadas)

Iriondo y Zeballos

Mendoza y Crespo

Iriondo y 9 de julio

Caferata y Zeballos
3 de febrero y Caferata 

Caferata y 9 de julio


Imágenes extraídas de http://www.skyscrapercity.com/showthread.php?t=641888&page=19


Un boom que llegó a los barrios

  El boom de la construcción en la ciudad de Rosario es un hecho, desde ya hace más de diez años, decenas de edificios se levantan anualmente en el centro, macrocentro y también en los barrios rosarinos. Los motivos de su masificación son varios, aunque existe uno que se lo podría considerar como el principal, la grave crisis política, social y económica que sufrió el país en diciembre de 2001. Aunque suene contradictorio, quienes  en ese entonces tenían una cantidad de dinero importante ahorrado bajo la almohada-que habían logrado escapar del corralito- tras la caída de la convertibilidad dejaron de creer en el banco y decidieron invertir en la construcción.

Imagen tomada desde la torre de la terminal de ómnibus (Santa Fe y Caferata)
  Al igual que toda la ciudad de Rosario, el barrio Echesortu, comprendido por las calles Santa Fe, Avenida Francia, Avenida Pellegrini y las vías del ferrocarril Belgrano, se vio fuertemente modificado por la masiva construcción. La constante edificación generó cambios tanto a nivel social en los vecinos y comerciantes de la zona, como obviamente a nivel paisajístico rompiendo con la fisonomía habitual del barrio.

   En algunas zonas específicas tales como los alrededores de la Facultad de Medicina- ubicada en Francia y Santa Fe- se construyó mucho más que en otras debido a la demanda de los estudiantes provenientes de otras ciudades, pero ninguna zona pudo escapar del boom de la construcción. Calle Mendoza entre Francia y Avellaneda fue otra de las más afectadas, en ese tramo, se realizaron en los últimos cinco años más de quince edificios.

Edificio en construcción (Caferata y zeballos)
  Según fue revelado en un  informe realizado por la Fundación del Banco Municipal, compuesto en base a estadísticas oficiales de las diferentes reparticiones públicas, en Rosario entre enero de 2000 y diciembre 2011 se autorizaron un total de 8.119.633 metros cuadrados, lo que implica 6,8 metros cuadrados por habitante.  Del total autorizado, un 73.6% corresponde a lo que refiere obra nueva, mientras que el 26,4 % restante corresponde a ampliaciones de obras existentes.

  En términos de superficie, en 11 años se han autorizado en Rosario el equivalente a 4,5% de la superficie total de la Ciudad, y al 6,8% de la superficie total urbanizada. Números que muestran por si solos el gran avance de la construcción en los últimos diez años. Otro dato interesante, es la caída que ha tenido el rubro “univiviendas”, reflejando cómo el fenómeno de la construcción se ha orientado principalmente a edificios.

 
Imagen tomada desde la torre de la terminal de ómnibus

La masiva construcción que se dio en la última década en el barrio Echesortu trajo consigo consecuencias enfrentadas, para los vecinos negativas y para los comerciantes totalmente positivas. Según revela una encuesta realizada a vecinos y comerciantes de la zona  de los veinte vecinos consultados, quince dijeron tener graves inconvenientes a partir de la construcción. Por otro lado, el total de los comerciantes encuestados ven al aumento de edificios como un hecho positivo ya que eso significa mayor cantidad de clientes.

Uno de los comerciantes consultados fue Saúl Eluk, el presidente del Centro Comercial Paseo Echesortu, quien manifestándose a favor de la construcción indicó que “hay que aggionarse a la época, al momento y a la sociedad, sino que la gente se vaya a vivir a las localidades vecinas”. Además, expresó que en cuanto a las ventas fue notorio el crecimiento a partir del boom de la construcción.

 Un punto en común negativo señalado por el total de los encuestados, tanto vecinos como comerciantes, es el incremento de la contaminación sonara debido especialmente a las máquinas ruidosas que se utilizan. Además,  la dificultad para encontrar un lugar donde estacionar el auto es otra de las desventajas, sobre esta problemática Eluk expresó una posible solución planteada a la Municipalidad de Rosario.


Finalmente, a partir de recorrer el barrio y dialogar con sus vecinos y comerciantes puede concluirse que el avance de la construcción tanto en el barrio Echesortu, como en todo Rosario es un hecho innegable que se da por el avance de la sociedad misma. Un cambio que se produce en base a las necesidades y exigencias de los mismos ciudadanos de una Rosario que se encuentra en pleno crecimiento. La preservación del entorno barrial, el patrimonio histórico y los espacios verdes son puntos fundamentales que la industria de la construcción y los gobernantes deben tener en cuenta para permitir el progreso pero no la transformación hacia una ciudad de cemento sin identidad ni historia.

miércoles, 20 de noviembre de 2013

Echesortu: un histórico barrio de Rosario


Desde el punto de vista catastral el barrio se denomina Remedios Escalada de San Martín, pero prevaleció la denominación popular en virtud de su historia ligada a los loteos de Ciro Echesortu. Las calles que marcan sus límites son: al oeste Paraná (o las vías del Ferrocarril General Belgrano) al este avenida Francia, al norte Santa Fe y al sur avenida Pellegrini. Su historia comienza alrededor del año 1880 cuando Echesortu, Arrillaga, Buratovich y Casiano Casas, propietarios de terrenos en esa zona, entonces rural, los subdividen para la venta en lotes y su posterior urbanización.

Paseo Echesortu
Este barrio, se caracteriza por tener una gran cantidad de actividad comercial que brinda a sus habitantes todos los servicios que necesitan sin moverse de la zona. La calle Mendoza entre Caferata y Avellaneda se convirtió en los últimos años en un mini centro que contiene dos galerías comerciales, una gran cantidad de negocios de primeras marcas de la industria textil, un hipermercado de cadena nacional y diversos bancos. Es importante destacar que en agosto del 2004 nace la “Asociación de Comerciantes Paseo Echesortu” con la idea de generar un importante emprendimiento comercial. Hoy, cerca de 10 años después, Paseo Echesortu se convirtió en el principal shopping a cielo abierto de Rosario.

Otro lugar que se fue tornando cada vez más comercial es calle Caferata entre Santa Fe y Mendoza, por su ubicación tan cercana a la terminal de ómnibus de Rosario creció notablemente con la incrementación del turismo en la ciudad. Allí, se pueden encontrar principalmente bares para tomar un café al paso, heladerías y algunos hostels.

Parroquia San Miguel Arcángel

Históricamente hablando, el “corazón” del barrio Echesortu se encuentra ubicado en la plaza Buratovich situada entre las calles Cafferata, 3 de Febrero, San Nicolás y 9 de Julio. Dicha manzana es la más significativa de la zona ya que alrededor de allí se encuentran algunos de los lugares más clásicos del barrio. Frente a la plaza, por calle 9 de julio se sitúa la Parroquia San Miguel Arcángel y por calle San Nicolás se ubica el Club Echesortu, popularmente conocido como "Eche" donde cientos de chicos practican una gran cantidad de deportes diariamente.


Bar "La Capilla"
 Otro de los lugares clásicos de la zona que fue protagonista del crecimiento del barrio es la esquina de Mendoza y Avellaneda. Hasta julio de 2010 se encontraba en una de sus ochavas el mítico Café y Bar “La Capilla”, un bar que todo vecino de la zona visitó alguna vez. El mismo era el último “café japonés” sobreviviente de Rosario y había sido inaugurado en 1946. En la esquina de enfrente, se encuentra la Parroquia San francisco Solano, una histórica iglesia del barrio Echesortu.





Fotos representativas del barrio Echesortu

Esquina de Alsina y Mendoza


Centro de la plaza Buratovich

Parroquia San Fransisco

Esquina de Avellaneda y Mendoza